jueves, marzo 28, 2024
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Pobladores y párrocos exigen recursos para restaurar sus templos

*Alberto Dzib*

FOTO: ALBERTO DZIB.

Al menos 300 pobladores del oriente del Estado de México e integrantes de la Diócesis del Valle de Chalco protestaron frente a palacio de gobierno mexiquense para que libere el recurso para desastres y se reconstruyan las iglesias de la región, pues a casi 7 meses del sismo del 19 de septiembre, aseguran que sus edificios religiosos continúan dañados o en ruinas.

A decir del vicario general de Valle de Chalco, Esteban Flores Aguilar, el 70 por ciento de las iglesias de la zona tiene afectaciones e inconforma a la gente pues, pese a suponerse cada una cuenta con seguro de daños por ser consideradas patrimonio cultural, no se han entregado siquiera los dictámenes de protección civil.

Dijo que, en específico, preocupan 25 edificios entre capillas y parroquias que podrían derrumbarse totalmente con la fuerza de las precipitaciones y, aunque la ciudadanía ha contribuido con dinero y trabajo para hacer algunas restauraciones no ha sido suficiente, por esta razón se exige respuesta de las autoridades federales y estatales.

“Eso es lo que nos interesa, ya estamos nosotros haciendo trabajos, pero no vemos nada del recurso de parte del gobierno, ni federal, ni estatal, entonces necesitamos tener respuesta”.

Aseveró que las cosas se pueden complicar si la desatención continúa, pues, además de la debilidad en las estructuras, la gente de los municipios de Amecameca, Tlalmanalco y Ecatzingo, donde se encuentran la mayoría de los inmuebles afectados, podrían reaccionar de forma violenta.

“No nada más riesgo en torno al edificio, sino que también la gente tome una actitud violenta porque ve que no se está haciendo nada, esa es la preocupación de todos los sacerdotes que venimos”.

Los representantes de la Diócesis de Valle de Chalco indicaron que este lunes entregaron las exigencias por escrito en las oficialías de partes del gobierno del Estado de México y en las instalaciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), con la expectativa de que antes de las lluvias se oriente el recurso y los inmuebles religiosos dañados puedan prestar el servicio que ahora brindan bajo carpas.

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