Desde las Alturas
*Arturo Albíter*
Mientras el Estado de México va a la baja en competitividad, resulta que Aregional lo coloca como uno de los cinco estado con mejores finanzas en el país
Ya se ha comentado que el Estado de México viene sufriendo últimamente en el tema de competitividad y, aunque algunos líderes empresariales les parece difícil que estemos en el lugar 24 como lo anota el IMCO, reconocen que tampoco en los primeros lugares como lo marcaba el Doing Business hace un par de años.
A pesar de ello, otros actores de la iniciativa privada, principalmente del Valle de México, están de acuerdo en las malas calificaciones, porque la Mejora Regulatoria dejó de ser importante, nadie sabe lo que pasa con este tema, aunque aparentemente el año entrante, durante el primer trimestre, el gobierno estatal prepara avances sobre el tema.
Mientras eso sucede con la competitividad, resulta que Aregional, una publicación especializada en economía, finanzas y política, en una de sus más recientes aportaciones, pone al Estado de México entre las cinco entidades que mejor manejan sus finanzas, incluso la describen con un gobierno holgado en su situación financiera.
Con una calificación de 80.4, en escala de cero a 100, el Estado de México se coloca en la cuarta posición, sólo detrás de Aguascalientes, Querétaro e Hidalgo, el primer lugar tuvo una calificación de 90.5, mientras que el peor fue Veracruz que apenas alcanzó un 34.
En el estudio afirman que el gobierno mexiquense logró esa calificación por varias razones, principalmente el buen manejo y equilibrio de sus finanzas públicas, de igual forma tienen suficientes recursos para la inversión y para pagar los intereses de la deuda.
Los estados mejor calificados cumplieron la Ley de Disciplina Financiera y alcanzaron un superávit financiero de hasta el 16.5% de sus ingresos disponibles.
Son datos que dieron a conocer en el Índice de Desempeño Financiero de las Entidades Federativas del 2018 y concluyen que los mejor calificados tienen una buena administración de su endeudamiento, y hasta gozan de una holgada situación financiera.
A muchos puede parecerles casualidad, a otros no tanto, pero la portada de la publicación en su número correspondiente al mes de diciembre se la lleva precisamente el gobernador de la entidad, Alfredo del Mazo, y, entre otros conceptos que manejan en la nota de Aregional, el mandatario destaca que se han logrado importantes resultados, sobre todo el fortalecimiento de las finanzas públicas, que son bujía de programas de desarrollo social.
La transparencia es una de las acciones de más alta prioridad y el primer año ha sido de hechos y resultados.
Pues parece que son resultados que contrastan, por un lado la dinámica de competitividad va a la baja y por otro las finanzas del gobierno estatal parece que gozan de excelente salud.
Mientras diferentes sectores en Toluca hablan de la mala situación que pasan, Fernando Zamora en su informe de despedida dice que se da un 8
Pues parece que al todavía alcalde de Toluca no se le termina el buen humor y ahora ha pintado, más que enojo, sonrisas en muchos de los que vivimos en la capital, y no es para menos, pues en su informe de despedida se atrevió a decir que se autocalifica con un 8, aunque no dijo en cual escala.
Se va satisfecho con el trabajo que realizó durante este trienio y más contento se va porque asegura no dejar deudas. Aunque reconoce que le faltó trabajar en algunas materias, quizá por eso no alcanzó el diez anhelado, le falló en temas como la salud, cultura y seguridad.
Aunque para el tema de la seguridad le faltó pedir apoyo al gobierno estatal, en la secretaría general le hubieran facilitado algunas fórmulas matemáticas para colocar al municipio en la media estatal y nacional, en una de esas hasta arriba de la media.
Imposible no apuntar su comentario respecto a la futura gestión de Juan Rodolfo Sánchez cuando dijo que el nuevo gobierno deberá superar lo que hizo su administración. Para la mayoría no será muy complicado.
Parece que a Fernando Zamora rápido se le olvidó el principal termómetro con el cual la población califica a sus gobernantes y es el de la elección. Un tercer lugar no es nada decoroso.