Desde las Alturas
*Arturo Albíter*
Por lo menos cinco años más estará cerrado el ducto de gasolina que abastece al Valle de Toluca, por lo que deben traerla de otros lugares
Si bien ya no se han vivido momentos de apremio con el abastecimiento de gasolina en el Valle de Toluca, lo cierto es que la situación para los empresarios no se ha normalizado del todo y es que siguen sin abrir el ducto que en otro momento surtía de combustible a la zona del Valle de Toluca y buena parte de la entidad.
Todo parece indicar que los momentos de crisis han quedado en el pasado y para Jorge Pedraza, presidente de la Asociación de Distribuidores de Gasolina, en este momento el tema ya no es noticia, pero para que las estaciones de servicio tengan niveles satisfactorios de abastecimiento se debe principalmente al trabajo de los mismos empresarios.
El problema que afectó al Estado de México, pero sobre todo al Valle de Toluca y el norte y sur de la entidad, se debe a que cerraron el ducto que abastecía de combustible a esta zona, por lo que desde entonces se han dado a la tarea de buscar las mejores opciones para contar con el producto, pero no es barato.
En este momento ya entendieron la forma en la que actúa el Gobierno Federal acerca del tema del huachicoleo, pero en esta región no se han encontrado irregularidades, ya que todas las gasolineras trabajan normalmente desde que cuentan con gasolina suficiente.
De igual forma, explicó que a pesar de los apoyos que han otorgado con la reducción del impuesto especial, la gasolina no puede bajar más, ya que se gasta mucho en el transporte para llevarlas hasta las estaciones.
Lo que se ahorran con el apoyo gubernamental lo tienen que destinar para pagar el traslado de la gasolina desde otros estados incluso desde Tula, todo con tal de no volver a pasar por lo mismo.
Sobre una posible apertura del ducto que permanece cerrado comentó que por el momento no se tiene contemplado abrirlo, ni en el corto o mediano plazo, incluso todo parece indicar que en la presente administración federal no abrirán la estación de distribución.
Por lo tanto se mantendrán los precios porque deberán pagar el flete y si este servicio aumenta lo mismo pasará con el costo que deberán pagar los consumidores finales.
El FMI felicita a AMLO por su política de crecimiento, Banxico baja estimación del PIB y Moody’s nos pone en recesión técnica.
La directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, se reunió con el titular del ejecutivo nacional, Andrés Manuel López Obrador, y al salir lo felicitó por buscar impulsar el crecimiento económico inclusivo del país.
Todo parece indicar que fue una postura más apegada a las buenas formas y a lo políticamente correcto, porque no pasó mucho para que el mismo Banco de México y la calificadora Moody’s nos volviera a la realidad.
Las cifras no mienten, México es miembro de la OCDE, una instancia internacional que informa sobre la pobreza que afecta a 43% de la población, o lo que es igual a 53 millones de personas con tendencia a incrementarse, debido a las políticas que se han implementado.
Incluso no se puede pasar por alto, que si bien la representante del FMI viene y felicita al mandatario, hace unas semanas este organismo redujo su estimación de crecimiento para el 2019 a 1.6%.
Mientras Lagarde hablaba, casi al mismo tiempo, el Banco de México daba a conocer la actualización de la estimación de crecimiento para el país en el 2019 y, como es natural, la información no fue positiva.
Banxico redujo la previsión de crecimiento de la economía a un rango que en la parte más baja rompe la barrera del 1%, y así dio a conocer que puede estar en un rango de entre 0.8 y 1.8%, desde el 1.1 y 2.1% que había dado a conocer anteriormente.
Otra mala noticia, esta del exterior, la calificadora internacional Moody’s Analytics, en su división para América Latina, con base en los últimos indicadores económicos dados a conocer en México, explicó que estamos en lo que califican como una recesión técnica, la cual empezó el último trimestre del año pasado y se empeoró al inicio del 2019.
Esto quiere decir que la actividad económica, la producción industrial, el empleo y las ventas al mayoreo reportan contracciones en el último semestre.
El comparativo anual, la actividad económica al cierre del 2018 fue de apenas del 0.95% y al primer trimestre del 2019 de 0.28%. La producción industrial bajó del 1.7 al 0.2%. El desempleo subió del 3.36 a 3.49%.
Esta instancia explicó que si la economía de México no va más allá del 0.5% para la mitad del año, entonces ya se puede hablar de recesión en su término más amplio.
Lo peor del caso es que Alfonso Romo, jefe de la oficina de presidencia, señaló que México no está en riesgo de recesión, apostó 100 a 1 a que no habrá, pues parece que el funcionario tiene “otros datos” que no ha querido dar a conocer.
Porque todos los números anteriores en resumidas cuentas quieren decir que habrá menos empleo, aumentará la inflación, habrá más pobres y la planta productiva estará peor y cada vez tendrán menos dinero para comprar lo necesario.
No debemos olvidar que el Estado de México va en la misma dirección.
