jueves, diciembre 11, 2025
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Informalidad y desempleo cobran fuerza en México; 271 mil dejaron de trabajar

*Redacción Diario Evolución*

Foto: Internet.

Pese al incremento al salario mínimo y al anunció de proyectos para crear nuevos empleos, en agosto de este años, al menos 274 mil personas salieron de la población económicamente activa (PEA), lo que implica que dejaron de trabajar o de buscar empleo activamente, y la informalidad cobró fuerza en agosto de 2025 -más de la mitad de los trabajadores están bajo está condición- una proporción mayor a la del año pasado.

Incluso en las ciudades, donde se concentra el empleo formal, cuatro de cada diez trabajadores están en la informalidad. En datos generales, la informalidad alcanzó al 54.8 por ciento de la población ocupada en agosto de 2025, lo que equivale a 32.6 millones de personas, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi); en 2023, fue de 54.3 por ciento.

La población Económicamente Activa (PEA) fue de 61.3 millones de personas en agosto de esteaño, el nivel más bajo desde marzo pasado, donde, de ese total, la población ocupada sumó 59.49 millones, y de este número, 32.6 millones de trabajadores están en el sector informal.

Otro dato interesante está en los ingresos. En el caso del número de personas que gana hasta un salario mínimo se redujo en 2.8 millones, mientras que creció en 2.5 millones el grupo que no especifica cuánto percibe. Esta falta de claridad en los registros hace difícil saber si realmente hubo una mejora en el ingreso o si hay problemas.

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A nivel sectorial, el empleo creció en el comercio y el transporte, pero cayó fuerte en la agricultura, los servicios profesionales y la construcción. Además, cada vez menos trabajadores dicen necesitar más horas de empleo: la subocupación bajó a 7.1 por ciento, desde 8 por ciento en 2024.

Según el sexo, la ocupación de mujeres alcanzó los 24.3 millones de la población ocupada total, y la de hombres, 35.2 millones, con un aumento de 41 mil empleos en el caso de ellas. En contraste, la ocupación de ellos se tradujo en una caída anual de 242 mil.

A su vez, la población no económicamente activa (PNEA) ascendió a 42.9 millones de personas, o el 41.2 por ciento de la población de 15 años y más, lo que significó un aumento de 2.2 millones de personas respecto a agosto de hace un año. De esta categoría, 5.5 millones se declararon disponibles para trabajar, pero no llevaron a cabo acciones para hacerlo, por lo que constituyen el grupo que eventualmente podría participar en el mercado laboral.

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G.L.

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