jueves, marzo 28, 2024
Municipios

Peligroso normalizar la violencia hacia la mujer

*Melchor García*

Foto: Ilustrativa.

“Te acostumbras, ya sabes en qué parada de camión te van a voltear a ver, ya sabes que si pasa un taxista te va decir algo, ya sabes que si pasas frente a una construcción los albañiles te van decir un albur o realmente lo único que esperas, es que no pase de ahí.”.

Es la voz de una de las víctimas de la violencia contra la mujer quien comparte su miedo que asegura es el de todas, el no saber si regresará a casa con los suyos y pasará entonces a ser una estadística para las instancias de procuración de justicia, una desaparecida más, un vacío.    

En el marco del Día de la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres, lamenta, las agresiones se cuentan por millones, asegura es afortunada la que no conoce el miedo de una agresión física o sexual.

“Iba caminando tranquila, no iba en minifalda, iba en tennis, iba en tennis incluso ese día traía una chamarra que me quedaba grande, pasó un tipo en bicicleta, desde la bici con la mano me agarró el trasero, me metió la mano, me gritó estas muy rica, lo único que pude hacer fue quitarme el tennis y aventárselo, no le di obviamente, pero empecé a llorar, me encontré a un compañero de trabajo, me preguntó que me pasaba, comencé a llorar y me dijo: – ay, pero no te hizo nada más-“, expresó.

Al respecto la investigadora Elisa Balderas, especialista de Género de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, reconoce que las actuales políticas de protección a la mujer son insuficientes pues no se toca la raíz de la violencia tanto a hombres como mujeres como lo es el interior del hogar.

“La cultura donde se forma y pues son los círculos viciosos de la violencia, si la mujer recibe violencia pues lo reproduce hacia los hijos y los hijos finalmente van a tender a reproducirla, yo creo que eso es importante, es un tema que no se ha tocado.”, refirió la especialista.

En un estado donde en lo que va del año se contabilizan 95 feminicidios afirman que la parte más triste es que hemos normalizado este tipo de hechos violentos, con lo que ya no nos sorprende cuando alguien denuncia o padece la violencia.

“Que hablen, pero sobre todo le diría a sus mamás que les creyeran, no es algo bien difícil, cuando te abres y te dicen, no te pasó o no fue así y a las mamás que les crean.”, dijo una víctima de la violencia.

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