PRI: El dócil opositor que siempre revive

**Desaparece Alejandro Ozuna ante marchas de organizaciones**

**Alcaldes pueden abandonar Morena por falta de reelección**

Desde el año 2000, cuando Vicente Fox ganó la presidencia de la República, el Partido Revolucionario Institucional se volvió el partido bisagra que ayudó, gracias a sus legisladores federales, al PAN a gobernar y sacar adelante sus proyectos legislativos. Lo mismo pasó en el 2006, cuando Felipe Calderón no podía tomar protesta ellos le facilitaron el acceso y el quórum necesario para su toma de protesta. Ahora, con López Obrador es igual, el PRI no lo increpa, sus gobernadores lo reciben y sus diputados federales son muy condescendientes ante las medidas que toma para resolver problemas.

Pero, al igual que en el 2000, el PRI sólo está tomando aire para levantarse y volver a competir por la presidencia de la república, saben ser oposición y saben el camino, han elegido una postura de aliados de Obrador, con la finalidad de reconstruir su partido, luego de la estrepitosa caída que tuvo en julio del año pasado.

Desafortunadamente en estos momentos no tiene una figura que los ayude a levantar su imagen; por lo tanto, tienen que construirla, buscar entre su militancia alguien con el carisma y la capacidad suficiente para ser opositor inteligente y una vía para contrastar el proyecto de López Obrador que, hasta el momento, se fortalece cada vez más.

El primer paso será buscar un líder nacional que una a toda la militancia, salir fortalecidos de su proceso de renovación y volver a ser opción de gobierno, algo que hasta ahora es lo más difícil, porque La Mayoría Silenciosa no los tiene en los mejores términos.

Con Fox y Calderón tuvieron un trato preferencial en recursos económicos, les permitieron la corrupción, situación que con López Obrador no será igual; no fueron atacados por ser considerados aliados, respetaron sus cotos de poder en los estados, pero ahora, a pesar de ser aliados, las condiciones cambian.

Quien dé por muerto a los tricolores está en un error, muchos priistas están trabajando para reconstruir su partido, recorren el país en silencio, forjan alianzas, tiene autoridad moral y otros más esperan mejores tiempos.

Extrañamente, Alfredo del Mazo se encuentra perdido dentro del esquema nacional, se observa aliado del presidente, pero lejano de la sucesión nacional del PRI, no se ve que pueda ser factor en la renovación y mucho menos actor de peso para competir en las urnas.

En EdoMéx

La falta de operación política en el Estado de México quedó de manifiesto, la capital mexiquense fue secuestrada por ciudadanos y grupos en demanda de ser atendidos en sus diversos problemas; tres de las marchas que ha sucedido en los últimos días, dos fueron anunciadas, sin que el secretario general de gobierno, Alejandro Ozuna, hiciera algo al respecto, y lejos de cumplir con su responsabilidad al propiciar el diálogo, dejó que La Mayoría Silenciosa fuera afectada hasta por 8 horas con el cierre de calles en Toluca.

Los vecinos de San Francisco Tlalcilalcalpan se quieren separar de Almoloya de Juárez y ser el municipio 126, en su demanda desquiciaron las calles de Toluca, sin que la secretaría general de gobierno, a cargo de Ozuna Rivero, hiciera algo para impedirlo. Antorcha Campesina hizo lo propio para exigir servicios, obras y cuanta cosa se le ocurre, organización por cierto afín al PRI-Gobierno. Finalmente, los comerciantes ambulantes de diversas organizaciones, que han sido retirados del mercado Palmillas y Juárez, gritaron a los cuatro vientos atención, sin ser escuchados cerraron las calles.

Sin duda, alguien en el Estado de México no está haciendo su trabajo, porque es obligación de la secretaría general de gobierno atender este tipo de problemas, ¿En dónde está el titular, Alejandro Ozuna?, ¿por qué no puede atender detalles como estos?; digo, porque si hablamos de seguridad lo situación está fatal.

Morena

Durante el pasado proceso electoral, muchos alcaldes, diputados y regidores llegaron a puestos de elección popular gracias a las siglas de Morena, desafortunadamente muchos de ellos tienen poca afinidad ideológica con el partido y en casos particulares con Andrés Manuel López Obrador, por las medidas adoptadas durante su gobierno, lo cual, en el futuro, causará una desbandada.

Acción Nacional, Margarita Zavala y Manuel Espino serán quienes reciban en su partido a los alcaldes que no comulgan con el Obrador; en este caso, será interesante, con el tiempo, ver a dónde irán a parar Patricia Durán de Naucalpan, Ruth Olvera de Atizapán, Juan Rodolfo Sánchez de Toluca, Raciel Pérez de Tlalnepantla y Gaby Gamboa de Metepec, entre otros.

Algunos de ellos muy cercanos a Ulises Ramírez, el poderoso líder del Grupo Tlalnepantla. Una de las principales causas para no quedarse en Morena, sin duda, es que en el partido de AMLO no permiten la reelección.