jueves, abril 18, 2024
MunicipiosPortada

Reportan ataques de perros, callejeros y domésticos en Xonacatlán

Compartir:

José Ángel Gutiérrez.

Caninos hay muchos, como su puede ver en la imagen superior. Otros, domésticos (junto al auto rojo) mordieron a una menor, víctima también de influyentismo.

Sucede discretamente, pero ocurre, y lo saben algunos pobladores. Se trata de tres ataques de perros, reportados durante junio pasado, en Xonacatlán; donde también se atribuyen mordidas a caninos domésticos, estos últimos, con un caso particular culminado en impunidad, gracias a las “influencias” de sus dueños.

El primer caso, fue reportado a Diario Evolución por la señora Citlalli Mateos Noriega, madre de la pequeña Diana Gabriela, quien el pasado 11 de junio fue mordida en el hueco poplíteo, parte trasera de su rodilla derecha, en la calle 5 de febrero de la cabecera municipal.

Paradójicamente, la mordida contra la menor no provino de caninos callejeros, sino de uno “doméstico”, propiedad de Griselda Reyes Bustamante y Omar Rosales González, cuyas cinco mascotas salen a la acera y fuerzan a la gente a rodear la zona, sin descartar que dejan heces por doquier.

Citlalli emitió una demanda, ante el oficial conciliador-calificador de turno, pero su caso no prosperó, porque la autoridad no actuó en consecuencia; al parecer, porque la señora Reyes, quien argumentó que “no pagaría un centavo” por gastos médicos, es amiga de un funcionario de la oficialía.

La pequeña ya se encuentra bien de salud, pero debió sufragar gastos a través de su madre, quien el día de la mordida sólo vino a visitar a una amiga.

El segundo caso, lo relató un comerciante del tianguis, ocurrió el miércoles 14 de junio, durante el día de plaza, cuando un joven, no identificado, de unos 15 años de edad, cruzaba por el quiosco municipal, distraído con su celular y sus audífonos.

“Cuando lo vi, dije: ‘a este lo van a morder’ y pareciera que ‘mandé a los perros’. Cuando vi, lo empezaron a jalonear de la ropa, momentos después, se movieron hacia donde estaban los puestos y ahí tuvimos que darles sus cinturonazos, sólo así lo soltaron, y después se retiró, pero nos costó trabajo.”, relató.

Un tercer reporte provino de barrio El Espino, región Xonacatlán, donde una jauría de caninos agredió al señor Jaime Villavicencio, el pasado 21 de junio.

“Es uno de los principales problemas, incluso ese día agredieron unos a mi papá. Hay mucha gente que se ha quejado, ya que por las noches ya no se puede ni salir, y en la madrugada se la pasan ladrando; el problema es algunas personas los defienden.”, dijo el hijo del afectado.

Este medio abordó a la regidora Belem Juárez Mayen, de la Comisión de Salud Pública del municipio, con el fin de saber sobre si hay medidas adoptadas por el tema, pero al compás de “me reservo mi opinión, porque es un tema delicado” no se obtuvo una respuesta convincente.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *