Sube y sube uso de solventes para drogarse, adolescentes los más expuestos
*Melchor García*
Tan sencillo como ir a una ferretería y pedir un solvente, es como una persona consigue drogarse con inhalantes, pese a que su venta a menores de edad está prohibida, por lo que la cifra de usuarios, de este tipo de drogas, ha aumentado drásticamente en los últimos años.
Los daños son varios, pues estos químicos provocan deterioro al organismo, en especial al cerebro, sistema nervioso y a los riñones.
Información del Instituto Mexiquense contra las Adicciones (IMCA) señala que San Mateo Atenco es uno de los municipios donde esta problemática de salud pública ha ido al alza, esto por el giro económico de sus habitantes, quienes son peleteros y zapateros.
José Naime Libién, titular del IMCA, señaló que en estas actividades el thinner, el barniz, las acetonas, resistol amarillo y aerosoles son empleados constantemente.
“Encontramos que son drogas muy silenciosas porque por su facilidad para conseguirse no tenemos un registro de quién compra, quién consume, y no tenemos realmente cómo conseguirlo, pues, incluso, los trabajadores de forma inconsciente comienzan a inhalar, incluso menores”.
Entre menor sea la edad de consumo de los inhalables, es mayor el daño al sistema nervioso central, así como a los nervios periféricos, a los riñones -porque son los órganos que limpian al sistema y dónde se acumulan los químicos-, el hígado, los ojos y las fosas nasales.
Los inhalables ocupan ya el cuarto lugar de consumo en menores de edad, en especial en aquellos que tienen entre 12 y 14 años, superado sólo por el alcohol, tabaco y marihuana.
