miércoles, mayo 1, 2024
Opinión

Desde las alturas

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*Arturo Albíter*

Desde las Alturas
Foto: Especial.

FALTAN 9 DÍAS PARA LA ELECCIÓN

FALTAN 5 DÍAS DE CAMPAÑA

  • Horacio Duarte ¿Exceso de confianza o inseguro?
  • Estrategia de Morena dar por hecho un triunfo que no han conseguido en las urnas se hace más clara junto con preocupación.
  • Dato del día: Estado de México ocupa octavo lugar en percepción de discriminación, pero primer lugar indiscutible en números absolutos.

Justo ayer comentaba en este espacio sobre lo que parece la principal estrategia de parte de Morena en el cierre de campaña, ganar la elección antes del 4 de junio, como si ya no importara ir a votar, porque de acuerdo a HORACIO DUARTE, coordinador de la campaña de DELFINA GÓMEZ ya ganaron porque lo dicen las encuestas.

La elección en el Estado de México ya “está ganada” fue una de las tantas frases que DUARTE OLIVARES dijo durante una conferencia de prensa realizada este pasado jueves.

Y para que supuestamente no quedará duda, hasta manejó el audio de un supuesto especialista en el que afirma que no habrá cambio en las encuestas y que es imposible que gane el tricolor.

Nada raro a la narrativa que ha manejado en las últimas semanas, el triunfo les pertenece y si por alguna razón el día de la elección se da otro resultado entonces fue trampa o como lo mencionó por “cosas indebidas o cosas ilegales”.

Cómo en el PRI no hay nadie que se le enfrente o salga a decir lo contrario, pues llegó al grado de asegurar que con supuesta información de priistas que se han acercado a ellos, sus encuestas dan como resultado una diferencia de 15 puntos en contra.

GANAR O PERDER, LO NORMAL EN UNA ELECCIÓN

Cómo ya lo mencionamos, lo normal en un ejercicio como el que vamos a vivir el 4 de junio es ganar o perder, pero eso no depende de las encuestas o de un especialista, depende únicamente de la suma de votos el día de la elección.

Salir con 10 días de anticipación y afirmar que el único resultado que aceptarán es el triunfo de su candidata porque de lo contrario es trampa, parece un argumento igualmente tramposo.

La narrativa de cada uno de los partidos debe ser, que van a ganar, pero asegurar que ya tienen el triunfo porque lo dicen las encuestas y no aceptan otro resultado parece ser por demás peligroso.

Sobre todo porque si algo ha quedado claro y transparente en esta elección es la actitud que ha mostrado el mandatario estatal, no apoyar al que “fue” su partido, ordenar a su gabinete mantenerse al margen y negarle a ALEJANDRA DEL MORAL todo el apoyo que ÉL SI recibió cuando fue candidato.

Entonces la pregunta es ¿De dónde puede orquestarse la trampa si es que en verdad eso fuera cierto?

Dar por descontado un triunfo que no han ganado en las urnas es tanto cómo menospreciar el voto de los mexiquenses.

¿Es posible un triunfo de Morena por dos dígitos? Nadie puede adivinarlo, pero puede ser posible. Lo mismo que nadie puede asegurar que Alejandra del Moral va a ganar.

Puede dudarse de la legalidad de una elección, pero para eso existen instancias que determinarán si hubo inconsistencias o no, de acuerdo a la ley y no la palabra del coordinador de campaña de una coalición.

Respetar el voto de los mexiquenses debía ser lo más importante, no asegurar que si no ganan es trampa y con ello menospreciar la decisión de los que acudan a las urnas.

Si el dato oficial les da el triunfo, felicidades, pero de lo contrario, igualmente debían aceptar la derrota, al menos eso debía esperarse en una elección madura.

DATO DEL DÍA: ESTADO DE MÉXICO OCTAVO LUGAR EN DISCRIMINACIÓN

El Inegi presentó los resultados de la encuesta sobre discriminación en la que hace un comparativo de resultados con el 2017 y aunque la entidad se encuentra en el octavo lugar, es una situación que obedece a que toman en cuenta la proporción y no a la población total.

Y es que de acuerdo a la población de más de 18 años que manifestó haber sido discriminada, el porcentaje en el país fue de 23.7% de los mexicanos que pasó por una situación de este tipo.

Para el caso del Estado de México, en el 2017 el porcentaje de los mexiquenses que fueron discriminados era de 24% y para el 2022 tuvo un incremento de 7 décimas ya que llegó 24.7 de la población.

El primer lugar nacional fue Yucatán con el 32.1% de su población, que en comparación con el Estado de México hacen una diferencia de 7.4 puntos lo que puede calificarse como considerable.

Pero si ese dato lo pasamos al total de la población entonces la situación cambia radicalmente y el Estado de México, por ser el más poblado del país pasa a ocupar el primer lugar, indiscutible.

En territorio mexiquense de acuerdo al último censo del INEGI hace 3 años, vivían 16.99 millones de personas. Tomando ese dato como referencia, porque en la actualidad son más de 17 millones, el 24.7% nos daría como resultado que 4 millones 915 mil mexiquenses fueron discriminados.

Mientras, Yucatán tiene una población de 2 millones 321 mil habitantes, por lo que el 32.1% de su población equivale a 745 mil personas que fueron discriminadas.

Una diferencia considerable.

Incluso si sumamos la población con este problema de los tres primeros estados que son Yucatán, Puebla y Querétaro no suman lo mismo que el Estado de México. Entre las tres suman 3 millones 056 mil habitantes discriminados contra los 4 millones 915 mil que anotamos tiene la entidad.

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