En calles de Xonacatlán, montículos de tierra y agujeros trastornan la movilidad
*José Ángel Gutiérrez*
Obras inconclusas por parte de la administración de Serafín Gutiérrez bloquean algunos accesos y motivan rodeo de vía para ingresar a la cabecera y salir hacia carretera Toluca-Naucalpan
Los problemas de movilidad y obstrucción de calles persisten en el municipio de Xonacatlan, especialmente montículos de tierra, fango y agujeros, a consecuencia de obras inconclusas por parte de la administración que encabeza el alcalde saliente, Serafín Gutiérrez Morales.
Vecinos de la calle Gabriel Ramos Millán sur padecen por el acceso a sus hogares desde la intersección con Vicente Guerrero, esta última, una vía de alto tránsito y acceso a la cabecera municipal, cuyo tramo final es precisamente la explanada cívica y el palacio de gobierno.
En la calle Guerrero, entre Felipe Carrillo Puerto y carretera Amomolulco-Ixtlahuaca (El Canal), personal de obras públicas del Ayuntamiento dejó deteriorado el arroyo vehicular, concretamente, el área cercana a las banquetas en los dos sentidos de la vialidad.
Justo en la esquina con Ramos Millán, una zanja fue abierta para la rehabilitación de la red de agua potable y descargas sanitarias desde hace un par de meses, aunque hasta este domingo permanecía abierta y generaba obstrucción para acceder desde la vía Guerrero.
En esa misma calle, pero metros más adelante, con dirección a la alcaldía, también hay un agujero cuya base expone una válvula de una tubería de abasto de agua, lo que significa un riesgo de caída para los peatones, sobre todo cuando surge fango tras las lluvias.
Otras calles como Miguel Hidalgo, entre 5 de Mayo y Francisco I Madero, permanecieron cerradas por más de mes y medio, desde su arranque de obra en tiempos previos a la elección, lo que obligaba a los automovilistas a rodear hasta tres cuadras en calle José María Morelos.
Ese cierre de vía mantenía montículos de tierra que impedían el acceso hacia la calle 5 de Mayo, una salida natural desfogue hacia la carretera Toluca-Naucalpan, al complicar también un rodeo vehicular hasta la calle Francisco Sarabia, otra salida hacia la carretera.
El panorama se repite en varias vialidades, donde la situación se complica por el hábito de conductores de estacionarse en doble fila, inclusive cuando hay espacio pegado a la acera, aspecto que aunado a las condiciones de las calles se convierte en una molestia vecinal.
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