Morena cede atribuciones al PRI-Gobierno
**Ley de Comunicación pretende que acumule recursos para prensa**
**Ceden manejo de medios cuando llevan ventaja por la gubernatura**
**PAN y su aspirante Enrique Vargas, los más perjudicados**
Una de las funciones primordiales de los poderes y los organismos autónomos en los estados y en cualquier parte del país, es la comunicación, difundir sus acciones de trabajo, su ideología y posturas, por ello, no se entiende que el partido Morena en el Estado de México pretende que el los poderes Legislativo y Judicial, organismos autónomos y los municipios, cedan esta facultad al gobierno estatal en manos del priista Alfredo del Mazo.
La política de medios de Morena no ha sido buena desde su creación, la línea impuesta por su líder nacional, Andrés Manuel López Obrador, ha sido la de estigmatizar a la prensa, eso ha generado un alejamiento y un rechazo a trabajar de manera coordinada con los medios de comunicación. Pocos han sido los gobiernos municipales de Morena que han llevado una buena relación con la prensa, muchos de ellos no emanaron de sus filas y vienen de otros partidos. En el caso del Congreso mexiquense, Maurilio Hernández ha tenido un trato amable, por ello, no se entiende la intención de esta ley.
Hay dos vertientes de la ley, la parte administrativa y la parte política. En la primera acrecienta lo que en el presente y el pasado han demostrado, el gobierno del estado siempre ha marginado y estigmatizado a los medios locales; los gobernadores en su ánimo de conseguir cargos políticos más altos, han despreciado a los medios locales.
La pretensión de Morena es concentrar los recursos de los tres poderes en la Secretaría General de Gobierno, permitirle hacer un padrón de medios, pero el hecho de inscribirse no genera compromisos publicitarios. Todo a cambio de informes que revisará la Legislatura.
La iniciativa de ley fomentaría la desigualdad que existe en los medios locales, si la diputada hubiera estudiado un poco las cifras, se daría cuenta el dinero que gasta el Ejecutivo mexiquense en medios, cuánto gasta en medios nacionales y cuánto en medios estatales o regionales y obviamente, su iniciativa no ayuda en nada a los medios locales.
En la parte política no se puede entender que una acción de ésta naturaleza sea parte de la iniciativa inocente de una diputada, seguro hay un acuerdo con el grupo mayoritario de Morena. El GAP que comanda Higinio Martínez, está cediendo un voto de poder en la antesala de una elección, cuando llevan ventaja para el proceso electoral de gobernador.
El control de los medios le da al gobierno priista de Alfredo del Mazo la ventaja en la próxima elección de gobernador, su operación callará muchas voces disidentes de su gobierno, por el simple hecho de que no tendrán fuentes para hacerse allegar de recursos para subsistir.
El más perjudicado sin duda, es Acción Nacional, su aspirante Enrique Vargas del Villar tiene una amplia relación con medios de comunicación, su posicionamiento depende de los recursos que pueda manejar para llegar con una buena imagen al proceso electoral del 2023.
Se especula que el alcalde de Huixquilucan llegará a la Cámara de Diputados local en el 2021, pero si la Ley de Comunicación se aprueba el legislativo no tendrá recursos para promover a los diputados, eso frenaría la inercia que tiene desde hace 5 años.
La iniciativa de Morena también le quita autonomía al Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) quien se encarga de realizar sus propias campañas para promover el voto y le facilita al Poder Ejecutivo el manejo de medios en épocas electorales; Derechos Humanos y otros organismos autónomos también estarán supeditados a lo que diga el Gobierno del Estado, pues ellos concentrarán todo el andamiaje publicitario.
Morena se pondrá en el ojo del huracán y en caso de aprobarse dicha ley, se echará a los medios en contra, cuando tiene todas las ventajas para ganar la gubernatura en el 2023.
La más perjudicada será La Mayoría Silenciosa, que no tendrá contrastes políticos ya que la presente ley acabará con muchos medios independientes, quienes se sostienen con recursos municipales o de organismos independientes, evitando con ello que el Gobierno del Estado de México les coopte su línea editorial.
