viernes, marzo 29, 2024
Municipios

Por la salud y “paz interior”, importante rodar en la naturaleza, en bici de montaña

José Ángel Gutiérrez López

Casco, guantes, una bicicleta en buen estado y muchas ganas de convivir con la naturaleza, es lo que ellos necesitan. En el bosque, el monte o terreno con riachuelos donde la devastación aún no permea, ahí llegan en una lucha por la paz y la salud a bordo de una bicicleta de montaña.

Es el grupo de Rodadas de Pedro Negrete Suárez, excorredor de alto rendimiento, expresidente de la Asociación de Ciclismo de Estado de México, exorganizador de la otrora Vuelta al Edomex y delegado de la entidad en la Ruta Ciclista México, quien ahora se rodea de ciclistas a nivel recreativo.

Este equipo aglutina infantiles, juveniles, adultos y mujeres, quienes descartan la competencia y se centran en el cuidado de la salud a través del esfuerzo físico en una bici que sube, baja, salta y sortea obstáculos, llámense piedras, lodo, arbustos, veredas complejas o ríos pocos profundos.

“Para nosotros es una forma de seguir fomentando el ciclismo de una manera sana, más que nada esto ya es por salud. Hay mucha gente que por la edad deja de hacer ejercicio ‘y se va a echar kilos’, por lo que vienen enfermedades, sobre todo del corazón”, expone Negrete.

Por experiencia como excorredor, Negrete recomienda hacer ciclismo por salud, en cualquier grupo de montaña, en uno de los deportes más dinámicos del mundo.

“Lo que tratamos de hacer es agrupar la gente gustosa del ciclismo, en este caso de corte recreativo, no competitivo. Se hacen descansos antes de terminar los kilómetros, púes traemos mujeres, niños que comienzan y jóvenes, y rodar para oxigenar y ejercitar el cuerpo.

“Convives con la naturaleza. Hay lugares donde a veces no hay personas, nada, pero sí mucho silencio. Es una paz interior que se siente adentro, ya que descansas de un ambiente estresante del trabajo de la ciudad y te integras en el bosque en todo su esplendor”, añade.

Negrete siente cierta nostalgia por haber dejado gratos recuerdos como ciclista y también como promotor-dirigente… Hoy día no hay grandes premios, que son la motivación del ciclista, sino el compartir el pan y la sal tras cada rodada.

“El ciclo como ciclista competitivo ya lo terminé, bueno o malo, pero mi papel lo hice, ahí quedaron los antecedentes; como presidente de la asociación también puse mi granito para que se hicieran muchas cosas en el Edomex, por eso hoy me centro en lo recreativo con gente que fomenta el ciclismo”.

En la era de Negrete se lograron justas fuertes, como la Vuelta al Edomex, donde corrieron exponentes del calibre de los locales Irving Aguilar y Manuel Hernández, y los tlaxcaltecas exparticipantes del Tour de Francia, Julio Pérez Cuapio y Miguel Arroyo, que fueron compañeros y rivales deportivos de los mexiquenses en la Ruta México, donde también fue delegado en la década de los noventas.

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