martes, abril 23, 2024
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Una tradición de sabor y colores en Toluca

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*Melchor García*

Foto: Especial.

Toluca es su gente, sus manos, sus colores, pero también sus sabores, esos que, en este octubre, evocan a la Feria del Alfeñique espacios que venden, además de dulces, una parte de identidad y de lo que somos.

Jorge Sánchez Casas, artesano en la elaboración del alfeñique, recuerda a su padre cuando mira sus manos, pues con cada dulce que elabora es como si él le hablara; son las enseñanzas de su abuelo frente a los casos de cobre y las horas de trabajo en el taller puliendo cada detalle de las reinas de la fiesta de Día de Muertos, como son las calaveritas.

“Veía yo que contrataba gente personal para que le ayudara en la elaboración de los productos y era para mí un despertar, así de emociones, de muchos sentimientos, que yo creo que con el tiempo se fueron arraigando.”, Jorge Sánchez, artesano del alfeñique.

Dulce de calabaza, camote, pepita, mandarina, pero también hasta apio, nopal y este año con betabel, dulce de fruta características de las ofrendas que son buscados con recelo por el público, principalmente el extranjero.

Logros que no hubieran podido concretarse sin su mano derecha, María Eugenia Siles, esposa, madre, pero también maestra artesana; quien, luego de 35 años dedicándose a la decoración de las calaveritas de azúcar, afirma que hoy no entendería su jornada sin matizar y darle expresiones a las huesudas que acompañarán el regreso de nuestros seres queridos.

“Es una tradición que no debemos perder, es cómo estar en contacto con la vida y la muerte, y tenemos que apreciar la muerte, ya no tener ese pánico, sino verlo de otra manera, y esto como el pie de colores de sabores combinación hasta de olores con los dulces, pues nos hace ver se forma diferente esa época de año.”, refiere.

El día de hoy, reconoce, los artesanos buscan replicar la enseñanzas y secretos para evitar que lo que somos muera, haciendo frente a la invasión de costumbres extranjeras, como el halllowen, de la mano de su familia.

“Es la cultura que nos dejaron y creo que tenemos que seguirla sosteniendo es importante para mí.”, concluye.

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