En vía principal de Xonacatlán caminan entre montones de tierra, zanjas y hoyos
*José Ángel Gutiérrez*
**Obra iniciada el 15 de enero va atrasada en Independencia, lo que obliga a lugareños y visitantes a transitar terreno difícil, donde hay caos vehicular y bajas en ventas**
Ante considerables retrasos en la conclusión de obras en una calle principal, habitantes de Xonacatlán y municipios circunvecinos transitan entre montículos de tierra, zanjas, agujeros y pasos improvisados, con el problema adicional de vivir el caos vehicular alrededor de la zona.
La Avenida Independencia, acceso principal del municipio, está en proceso de remodelación desde el pasado 15 de enero, cuando el gobierno municipal dispuso su cierre inicial de una cuadra, en el tramo comprendido entre las calles José María Morelos y Santos Degollado.
Sin embargo, tras la culminación de la pavimentación con concreto hidráulico y reparación de tomas de agua y drenaje en tal tramo, la vía fue abierta al público, pero no a la circulación vehicular, lo que trunca el ingreso de automovilistas hacia la zona centro del municipio.
Personal de obras y servicios públicos comenzó la segunda y tercera etapa de trabajos, con el consecuente cierre desde la carretera Toluca-Naucalpan, a su paso por las calles paralelas Gustavo A. Vicencio y Morelos, así como por varios callejones intermedios.
Al quedar sin entrada principal, conductores de vehículos de carga, proveedores de mercancía, transporte público y particular trastornan vías alternas como 5 de Febrero, 5 de Mayo y Francisco Sarabia, esta última, una salida a menudo utilizada en sentido contrario.
Independencia es la calle que aglutina gran parte del comercio establecido, en el que sobresalen una conocida cadena de electrodomésticos, un banco, tiendas tradicionales y de conveniencia, farmacias de franquicia, zapaterías y panificadoras, por mencionar algunos.
Visitantes de municipios como Lerma, Otzolotepec, Ocoyoacac y Temoaya, así como moradores de Xonacatlán visitan esta zona para adquirir diversos productos, de ahí la necesidad de transitar en la vía, con una serie de obstáculos colocados durante las remodelaciones.
“Mire nada más, es un des… todo este lugar. Es cierto que una obra tiene un beneficio, pero esto ya tardó demasiado y nos afecta a muchos, porque tenemos que caminar por zanjas, máquinas y estos montones de tierra.”, indicó la señora Guadalupe, una visitante.
Si bien están habilitadas las aceras de ambos lados, la reparación o colocación de tomas de agua propicia la apertura de agujeros desde los domicilios y/o locales hacia la banqueta y arroyo vehicular, lo que obliga circular sobre el arroyo y pasar tablas inestables a manera de puentes.
Varios locatarios han registrado bajas en sus ventas, por lo que requieren la culminación de los trabajos para no ver afectada su fuente de ingresos.
