Gobiernos municipales deben transitar a entes metropolitanos
*Melchor García*
Los próximos gobiernos locales, en el estado, serán los primeros que estarán obligados a cambiar su vocación municipalista, para tener carácter metropolitano, esto ante el crecimiento que ya enfrentan las demarcaciones y el tránsito de los espacios rurales a urbanos y los urbanos a metropolitanos.
De acuerdo con Carlos Giménez, investigador de la facultad de Planeación Urbana y Regional de la UAEM, es urgente que cada gobierno se coordine para el establecimiento de planes de desarrollo, que establezcan qué tipo de ciudad queremos para las próximas décadas, atendiendo ejes como movilidad, transporte, vialidades y equipamiento con los servicios.
La no modificación de los planes de desarrollo municipales implicará planes parciales, que no evitarán el impacto del crecimiento de la mancha urbana que ya sufre el Estado de México.
Explica con el caso específico del tren Interurbano México Toluca que, por sí solo, impactará en el crecimiento inmobiliario del Valle de Toluca, con lo que se requiere la generación de rutas de transportes, infraestructura para soportar el nuevo aforo vehicular y una nueva regulación de los predios existentes, esto para la construcción acorde a nuevas normas urbanas.
“Lo más importante es que realmente la población haga uso de los nuevos proyectos y los integre de forma ordenada y con la normativa establecida, lo más importante es incluir a la sociedad dentro de estos proyectos pero sin dejar afuera las políticas que están determinando para el bienestar de la sociedad”.
El Estado de México, lamenta, no ha sabido crecer con inteligencia a partir de la extensión de su territorio y el número de habitantes que tenemos, pues la constante ha sido la aparición y crecimiento de conjuntos urbanos y residenciales sin definición exacta de cada uno.
“La diferencia es que cada plan municipal históricamente ha tenido su propia naturaleza no es lo mismo el plan de desarrollo de Almoloya de Juárez, que el de Ixtapaluca”.
La contraposición, entre planes, implicará poner a millones de personas en situación de riesgo por la destrucción de un modelo de vida sustentable, que privilegie el bienestar de las familias.
