viernes, marzo 29, 2024
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Entra la fuerza pública a Acazulco

*Melchor García*

FOTO: MELCHOR GARCÍA.

Pobladores de San Jerónimo Acazulco denunciaron la irrupción de la fuerza pública en la comunidad, ocupando 20 hectáreas con cuatro mil policías federales y estatales, en lo que significa la ruptura del diálogo con las autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

Luego de su anuncio para iniciar una caravana informativa de respuesta a las acusaciones que les hicieran, señalándolos responsables del retraso del Tren Interurbano , indicaron que la tarde noche del lunes la fuerza Federal ocupó el espacio, a pesar del sobreseimiento al amparo de los comuneros que se encuentra ante un tribunal colegiado, lo que representa una violación a la suspensión a la obra que ellos habían obtenido.

Señalaron que esta conducta sólo puede entenderse como la falta de capacidad de la Secretaría para lograr un consenso y un proyecto que no afecte a las comunidades, y no sólo beneficie algunos cuantos.

“Sabíamos que mientras mantenía el diálogo con unos cuantos de la comunidad estaba instrumentando una estrategia para entrar con la fuerza pública” expresaron.

De acuerdo con Santiago Pérez Alvarado, abogado defensor, esta acción los hace confirmar su postura referente a rechazar cualquier lucha violenta buscando el agua y la tierra para su comunidad.

Indicaron que la Secretaría Comunicaciones y Transportes tomó por cuenta propia la acción con su mano dura; tema del que dijo no caerán en provocaciones ni en la violencia.

“Estamos caminando para que la gente reconozca, hay otra injusticia del gobierno, metieron a la fuerza pública porque se les acabaron las palabras”, expresó.

En este sentido, enfatizó que tan sólo en el inicio del diagnóstico qué están realizando a lo largo de todo el proyecto del tren interurbano han encontrado evidentes retrasos, no sólo en Ocoyoacac, sino en todo el trayecto, pues todas las estaciones muestran evidente lentitud en su obra.

“Están retrasados no por culpa de los habitantes es una obra faraónica del presidente Peña que no fue bien planeada”.

Reiteraron su posición en el sentido de que no quieren el pago de tierra, sino el desarrollo de un plan integral sustentable que garantice el sostenimiento de sus manantiales y territorios sagrados.

“El asunto no es el dinero, el asunto es la Tierra, porque para pasar un tren elevado generando pobreza, falta de agua y sin desarrollo para las comunidades que toca los territorios se van a dividir y la cultura se va a ir perdiendo”, lamentó.

Los elementos federales que ya resguardan la zona están ubicados en la región conocida como el Pantano y la Maguillera.

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