jueves, marzo 28, 2024
La Mayoría SilenciosaOpinión

Elección del domingo deja sentimientos de derrota, triunfalismo y optimismo

Las elecciones del pasado domingo dejaron sabores de triunfo, derrota y optimismo entre los partidos políticos, cada uno de ellos ha comenzado a delinear su estrategia, no solo para enfrentar el proceso electoral del Estado de México, sino para ligar sus expectativas rumbo al 2024, en donde la elección presidencial puede dejar sin registro a uno o varios partidos.

Hay poco que hablar de Morena, su triunfo no solo lo ubica como la principal fuerza política en las preferencias de La Mayoría Silenciosa, con su optimismo advierten que ahora vienen por el Estado de México y Coahuila en el 2023.

Y mientras, en el PRI la derrota fue tomada con valentía por su líder, quien ve con buenos ojos el futuro que los depara, su líder, Eric Sevilla anticipa la resiliencia que caracteriza al PRI para levantarse de los escenarios adversos, advierte que el tricolor no está derrotado y sabe reponerse de los malos resultados. Hay que ver qué piensan sus bases de cara al 2023, muchos de ellos no cuentan con recursos para desarrollar sus actividades políticas en los municipios y, ante el escenario, pocos invertirán sus recursos en un proyecto que se ve perdido.

El PRI no entiende que necesita renovarse, las encuestas lo califican como el partido más rechazado por los ciudadanos, solo gobiernan dos estados y los resultados de gobierno en esas entidades son verdaderamente pobres, tal vez puedan competir por el poder, pero eso no augura nada bueno, los malos gobiernos lo han alejado de La Mayoría Silenciosa.

De acuerdo con los resultados, el PAN es la oposición de Morena, ganaron dos gubernaturas y a diferencia de sus aliados, pueden dar la cara al electorado sin ser cuestionados como el PRI. El problema es que sus aliados no tienen la intención de ceder la candidatura a Enrique Vargas del Villar y la alianza tampoco es garantía de triunfo.

En Movimiento Ciudadano ya tomaron la decisión, irán solos en la contienda del 2023, no importa que los partidos los presionen con sus críticas, hasta ahora el método le ha funcionado a Dante Delgado y no habría por qué cambiarlo. Su candidato hasta el momento es Juan Zepeda, aún con los escasos resultados que dio en la pasada elección, aunque también son hábiles para cachar lo que caiga de otros partidos y un candidato desaprovechado por el PRI bien puede encabezar su proyecto.

El PRD va de desgracia en desgracia, en dos estados perdieron el registro que sumados a los del 2021, los deja sin representación en 19 estados. No tienen una figura fuerte para competir en el 2023 y sumarse a la alianza los dejaría prácticamente a un paso de perder el registro nacional. La opción sería buscar un candidato externo que los lleve a recuperar algo de lo perdido, porque sus aspirantes nomás no crecen en las preferencias electorales.

El PT se encuentra en las mismas circunstancias, mientras no convenzan a Fernández Noroña de ser su candidato, sus posibilidades de conservar el registro en territorio mexiquense son escasas. El problema es que si Noroña acepta, la situación con López Obrador será de confrontación, porque sería la segunda vez que el PT le juega las contras a su candidato. Vaya dilema para el PT.

En el Partido Verde las cosas no terminan de aclararse, por un lado los compromisos de José Couttolenc con el PRI en el Estado de México son prioridad, por otro lado la presión a su dirigencia nacional para sumarse con Morena en territorio mexiquense, tiene la decisión en vilo.

En general, los partidos buscan a través de las candidaturas comunes o de las coaliciones, las rendijas de la ley electoral para dar vida a sus aliados y, de esta manera fortalecer sus aspiraciones de triunfo. La Mayoría Silenciosa está a la espera de los proyectos y de las personas que los encabecen, es momento de que el Estado de México tenga alguien que lo gobierne y solo administre sus recursos.

Fernando Vilchis con buenos resultados en Hidalgo

El triunfo de Julio Menchaca Salazar en el estado de Hidalgo vino fortalecer la imagen del alcalde de Morena en Ecatepec, Fernando Vilchis, quien jugó un papel importante en las elecciones del domingo para que su correligionario ganara la entidad. Vilchis está feliz porque demostró que puede operar en unas elecciones fuera de Ecatepec y con buenos resultados.

Falta ver si Claudia Sheinbaum tomó en cuenta la operación política del presidente municipal y lo pone en la palestra de los aspirantes a gobernador, hasta el momento solo prevalecen en el ambiente los tres de Texcoco.

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