martes, abril 23, 2024
La Mayoría SilenciosaMunicipiosNacionalesOpiniónPolíticaPortada

Muchos delitos en video, pocos castigos conforme a la Ley

Compartir:

**Quién será el valiente que se anote para líder de Morena**

En las últimas semanas han circulado videos de Emilio Lozoya y de Pio López Obrador; en el primero, se ven supuestamente sobornos para la aprobación de la reforma energética de Enrique Peña Nieto, en el segundo, supuesto dinero para la campaña de Andrés Manuel López Obrador en el 2018. Los mismos tienen que ver con la lucha electoral que se avecina, con los rencores personales, pero están muy alejados de la aplicación de la ley.

Estos shows mediáticos pondrán en evidencia a muchas personas, algunos, como ya lo ha hecho el presidente Obrador, justificarán las evidencias, lo cierto es que la justicia será una observadora y tendrá que convencer con castigos su actuar.

La competencia electoral en México antes admitía desde la campaña negra hasta el uso de recursos de procedencia ilícita, hasta hoy, las autoridades electorales no tienen los recursos para fiscalizar todas las competencias electorales y muchas veces no quieren participar en los casos más evidentes, ya sea por presión o por incapacidad.

La parte más débil es la aplicación de la Ley, la justicia electoral es ciega y en muchos casos tardía, durante muchos años se permitió a ojos vistos la trampa, la guerra sucia o el uso indebido de recursos y los castigos llegaron mucho tiempo después. Los competidores sabían las lagunas legales, pero lo importante era lograr el triunfo, ya después venía la sanción o el jalón de orejas de la autoridad. No esperemos que hoy las cosas sean diferentes.

Haciendo un poco de memoria, en el 2006 el candidato del PAN, Felipe Calderón Hinojosa, tuvo en su poder el padrón electoral a través de Diego Zavala, hermano de Margarita Zavala, y su compañía, Hidelbrando, quien no controló el programa de resultados preliminares, pero sí tuvo acceso al padrón. En la misma campaña se difundieron spots televisivos en donde manifestaban que “Obrador era un peligro para México”, a pesar de la guerra sucia la sanción llegó cuando el daño ya estaba hecho.

En el 2012, Enrique Peña Nieto repartió a diestra y siniestra tarjetas de prepago de la empresa Monex, que se podían intercambiar por alimentos y todo tipo de mercancías en diversas tiendas; en ese entonces el IFE (hoy INE) se negó a sancionar el financiamiento irregular y solamente sumó una cantidad menor a sus gastos de campaña. Sin embargo, en el 2017 el INE decidió sancionar con casi 100 millones de pesos al PRI-Verde por haber prorrateado recursos de candidatos de la coalición a campañas de candidatos que no estaban en el convenio. Peña ya iba de salida de su mandato y gobernó tranquilo sus seis años, porque la sanción llegó 5 años después.

Ahora, Emilio Lozoya exhibe los sobornos entregados a panistas para aprobar la reforma energética y de paso involucra en casos de corrupción a Enrique Peña Nieto, Luis Videgaray y hasta al mismo expresidente Carlos Salinas de Gortari. Desafortunadamente se comenta que todo es parte de un show mediático ya que muchos delitos prescribieron, por lo tanto, la ley no los puede castigar. En este caso el presidente, Andrés Manuel López Obrador, anunció que setenta personas serán interrogadas, obvió, todo para cumplir con su venganza personal y alentar el linchamiento mediático.

Finalmente, el periodista Carlos Loret exhibe en el portal de noticias Latinus, un video en donde David León cercano a López Obrador y en vías de abordar un cargo público en el IMSS, entrega dinero a Pio López Obrador, hermano del presidente, supuestamente para ayudar a la campaña en el 2018. La Mayoría Silenciosa apuesta a que no se va a castigar el delito.

En Morena

La contienda interna en Morena se ha puesto interesante, luego de que el Tribunal Electoral determinará una encuesta para elegir al próximo dirigente nacional, misma que el INE hará, sin que haya una petición expresa del instituto político, con lo cual, viola la libre determinación y organización de los partidos, además permite que cualquier militante o simpatizante se postule sin ser consejero nacional, requisito indispensable en los estatutos del partido.

La decisión del Tribunal Electoral además de que se vuelve impugnable, mete en problemas al partido y seguro, enoja mucho al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador que ya tenía un plan muy estructurado. Ahora solo falta ver quién es el valiente que sin el consentimiento de López Obrador se inscriba a la contienda y le haga sombra al candidato que él mande.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *