“No somos agachones ni cobardes”, dicen en Temoaya, en protesta por la tala ilegal
*José Ángel Gutiérrez*
**Vecinos de secciones de San Pedro Arriba toman la carretera Centro Ceremonial en defensa de sus bosques; amagan con más movilizaciones y no se dejarán intimidar**
Enfurecidos porque cotidianamente miran descender camiones cargados con troncos de árboles, habitantes de distintas secciones de la comunidad de San Pedro Arriba, perteneciente al municipio de Temoaya, protestaron contra de la tala clandestina registrada en bosques de la zona.
La movilización comenzó la tarde de este lunes alrededor de las 13:30 horas en la carretera Centro Ceremonial Otomí, a la altura de la primera sección de San Pedro, donde cerca de 60 moradores mostraron varias mantas de rechazo contra la deforestación.
“Prohibido pasar camiones con trocos por San Pedro. Te vamos a detener. Defendamos nuestros bosques. No somos un pueblo de agachones y cobardes.”, decía la leyenda de una manta mostrada por pobladores, quienes cerraron aquella vialidad de manera intermitente.
En otra manta, los inconformes cuestionaban al gobernador Alfredo del Mazo Maza, “¿Con qué derecho nos dejas sin bosques?”, con letras acompañando un “¡Ya basta!”, señal de hartazgo de los moradores, quienes conocen las zonas donde la tala ha devastado sus bosques.
Una moradora identificada como “Yuldiz” aplaudió la decisión de los vecinos, al tiempo de señalar que con la tala en poco tiempo quedarán sin agua las nuevas generaciones, por ello hizo un llamado al resto de las comunidades para detener este flagelo contra la naturaleza.
“¿Para cuándo es la próxima manifestación?, para poder participar y apoyarlos. Deberían hacer un comunicado para que participen más comunidades. Mis felicitaciones a todos los que participaron y para que los que tuvieron iniciativa sigan adelante.”, dijo por su parte Abel.
El corte desmedido de árboles ocurre en la zona limítrofe con el municipio de Otzolotepec, al norte del paraje Las Canteras y en sitios nombrados de diferentes formas por pobladores, quienes a temprana hora escuchan motosierras y otras herramientas de corte.
Horas después fue reabierta la circulación total, con amago por parte los vecinos de comunidades indígenas de tocar próximamente las campañas de los pueblos, con el fin de engrosar la protesta, ya que los talamontes y sus solapadores no podrán intimidar a la población.
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