viernes, abril 26, 2024
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Nueva Izquierda del PRDEDOMÉX exige que el gobernador no interfiera en la alianza PRD-PAN

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Alberto Dzib

“El respeto al partido ajeno, es la paz”, resaltó el dirigente nacional de la corriente Nueva Izquierda del Partido de la Revolución Democrática, Jesús Ortega Martínez
“El respeto al partido ajeno, es la paz”, resaltó el dirigente nacional de la corriente Nueva Izquierda del Partido de la Revolución Democrática, Jesús Ortega Martínez

“El respeto al partido ajeno, es la paz”, resaltó el dirigente nacional de la corriente Nueva Izquierda del Partido de la Revolución Democrática, Jesús Ortega Martínez al presumirse que Eruviel Ávila, gobernador del Estado de México, como principal afectado ante una posible alianza entre su partido y Acción Nacional, ha intentado evitar que ésta se lleve a cabo con su influencia en un porcentaje de la fracción perredista en el congreso local.

“Pienso que no debe de meterse porque está cometiendo un ilícito y un delito, no debe de intervenir en la vida interna de ningún partido, ni siquiera del suyo”.

Dijo que al gobernador mexiquense y a su grupo político, les irrita la idea de pensar en el acuerdo entre el PRD y PAN, pues desde su punto de vista esa es la única forma para que después de 80 años, el PRI sea retirado del poder en el Estado de México.

Por ello, llamó a los militantes del PRD en el estado a facilitar las condiciones para armar el frente de oposición y sin condicionantes, como lo ha hecho la dirigencia estatal a cargo de Omar Ortega Álvarez, en donde se ha destacado que el PAN sería última opción y de darse alianza con ellos, el candidato deberá ser del sol azteca.

“La verdad no quisiera entrar en controversia con el dirigente de mi partido en el Estado de México pero yo más bien quisiera precisarle que sí vamos a una alianza, pues lo primero que tenemos que hacer es no condicionarla, sino platicar para ver cómo podemos crear las condiciones para que ésta alianza se materialice “.

Agregó que de darse el acuerdo entre ambos partidos y otros que se pudieran sumar, con excepción del PRI, la forma de gobierno, al ganar el Poder Ejecutivo, se basaría en una agenda común, ya que también se apostará por la figura de candidaturas comunes en donde se apoya a un mismo personaje pero con identidad de partidos propia.

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